Gracias por disimular mis limitaciones, gracias por tolerar mis inconsistencias, gracias por perdonar mis errores, gracias por soportar los tackles que erré y las veces que no estuve a la altura de las circunstancias. Solo pude ofrecer en estos 4 años: compromiso, seriedad, esfuerzo y contracción al trabajo. Di lo mejor que pude dar, se los aseguro, pero fundamentalmente, que disfruté muchísimo. Gracias por haberme aceptado en su grupo y por las muestras de cariño que siempre recibí de la mayoría. Si alguno pone feliz que me retire, me satisface que ahora pueda darle una alegría, quiere decir que no les pasé desapercibido. Les aseguro que fueron 4 años muy importantes y lindos para mí, y los invito a que no abandonen este deporte, que sin duda, es el mejor de todos por los valores que pregona. Gracias a todos los muchachos que pasaron por el plantel en este tiempo, con los que pude entrar cada sábado en la cancha, a los entrenadores, a todos los que colaboran y a toda la familia de Pacific. Mañana es mi último partido y por eso aprovecho: Lo único que puedo decirles nuevamente es GRACIAS A TODOS.
DARTA
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