A continuación se transcribe una nota publicada por Gemán Filippini en www.pacificrugby.com.ar la página oficial del rugby del club.
Muchas veces siento que fracasamos como club, pese a los “Buenos Entrenadores” y a que sacamos “buenos” jugadores. ¿Porqué tantos dejan de jugar a temprana edad y no vuelven a pisar más el club? La respuesta más habitual y más facilista es que los jóvenes tienen menos compromiso (“no son fanáticos como éramos nosotros.....), menos pasión, y muchas otras opciones.......
Pero...¿Les damos un espacio y valores de pertenencia? Esto puede ser parte importante, pero no la única.
Hay cosas que no se aprenden técnicamente, por “mejor entrenador” que se tenga.Lo esencial, los valores, la pasión, se maman de los mayores, de los adultos referentes. De los padres en primer término, pero también de los maestros, de los jugadores modelo , de los entrenadores, de algún árbitro, dirigente........No se trasmiten a través del discurso, sino del ejemplo, de lo que hacemos cotidianamente.No se cuanto podamos influir en nuestros chicos y jóvenes jugadores, pero para algunos podemos ser referentes importantes para su vida. Yo tuve mucha suerte. Por lo pronto tuve un padre generoso......, de esos que acompañaban todos los Domingos, poniendo el auto para llevar 5 o 6 de nosotros, para poder jugar; y sus comentarios eran siempre lo bien que habíamos jugado, aunque muchas veces no fuera cierto.............Nunca habló con ningún entrenador, ni opinó quien tenía que jugar o quien no.Tuve suerte de tener entrenadores y mayores , que me trasmitieron la esencia del rugby. Eddie Gold, mi primer entrenador, era un pilar, que creo no sabía demasiado del juego. Pero nos llevó todo un año, viajando en trenes y colectivos, a jugar a 14 pibes de 6ta. división, perdiendo casi siempre. Y llegó a juntar cerca de 24 chicos, varios de los cuales jugamos muchos años en el plantel superior del club; otro es árbitro, alguno dirigente, y varios entrenadores por años.......... John Moffat y Gustavo Frischneckt eran dos veteranos, que a los 40 años se volvieron a poner la camiseta para jugar en Intermedia, cuando el club se quedó sin jugadores. Par que el rugby no desapareciera de su club se comían 70 puntos con el SIC o Con CUBA Yo jugué con ellos a los 15 años, e hice varios tries servidos por estos “viejos”. Nunca dejaron que me tocaran. Siempre me dieron la pelota para que correr y rematar una jugada fabricada por ellos. Ellos me enseñaron la generosidad y la entrega.Paulino Santander, era otro pilar de la Primera. Profundamente apasionado, me entrenó dos años en cuarta división, De él aprendí a “leer” el juego y a jugar de octavo.( no poca cosa) Y aprendí a que al jugador hay que darle confianza.Con su “sota, caballo y rey” o “ se te cayo el balde”, enseñaba más cosas que con palabras técnicas.Aprendí a que al jugador hay que cuidarlo, si se lesiona ;hay que preservarlo por sobre el resultado ( cuando no me dejo jugar contra CUBA , porque el domingo anterior me habían sacado en camilla de la cancha.)De Osman Dalverme, con quien no tenía mucha empatía, aprendí la disciplina, el silencio, la concentración, el esfuerzo hasta el agotamiento. Además aprendí el contacto y a formar en el scrum hasta los mínimos detalles.Jorge Dartiguelongue me dio la titularidad en la primera en mi puesto de Octavo, pese a mis cuestionados 76 kg. Me dio la confianza y la posibilidad de crear...........fue mi mejor año como jugador.Nunca llegué a jugar con él, pero siempre quise ser como ese grandote morocho, que se cambiaba en silencio, que los Sábados se entrenaba solo, que nunca fue Capitán, ni lo vi hablar con el árbitro, ni reprochar a sus compañeros, a pesar de que en esos años peleábamos el descenso. Cacho Virasoro no era un virtuoso, pero era un modelo de humildad y esfuerzo. Y fue PUMA varios años.Desde que empecé a jugar al Rugby hace 33 años, Ricardo Cantarini llevó la administración , el papelerío, y toda la ingrata tarea que eso significa. Es el que recibe todas las quejas, y el menor reconocimiento................ De todos escuche cuestionamientos, críticas y desvalorización; casi nunca escuché reconocimiento a su trabajo. Que poco reconocemos a los tipos que hacen que el Rugby exista, y que los jugadores puedan disfrutarlo.Los entrenadores, dirigentes, maestros, entrenadores, árbitros , los que hacen el asado, los padres colaboradores...........somos un equipo. En un equipo cada uno es importante, en su puesto y con su habilidades y sus limitaciones, son los mejores. Especialmente porque están presentes. Tal como un pilar, aunque lo suyo no luzca, sin la pelota no hacemos tries.Si tenemos claro ésto, ......y que lo más importante es nuestro Club; si reconocemos con humildad nuestras limitaciones; y nos tenemos confianza, y nos apoyamos ;, si ponemos pasión, entrega, generosidad en lo que hacemos...........estaremos en el buen camino.Y especialmente nuestros chicos van a “mamar” esto, que no se aprende en una charla, o a través del discurso.Sino, podemos “saber mucho del juego, de la técnica, de la táctica o de la estratégia”, pero no entendimos nada del Rugby.Somos los responsables de lo que construímos.Por supuesto que ésta no es una verdad absoluta, pueden estar de acuerdo o no.
Pero la comparto para que si lo les parece que vale la pena, reflexionen sobre ella.
Germán Filippini
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